Cristóbal es un empresario dedicado a la tecnología, que desarrolla soluciones para la industria agrícola mundial, con el objetivo de mejorar la eficiencia y rendimiento obteniendo cultivos más rentables y de menor impacto ambiental. Comenzó mientras todavía estaba en último año de Ingeniería Civil Electrónica en la Universidad Técnica Federico Santa María en el 2005. Desde entonces, la empresa WiseConn que creó con 3 amigos, ha crecido para convertirse en líder mundial de eficiencia de riego mediante uso de tecnología, con presencia en 12 países, el principal Estados Unidos. En WiseConn, y luego de algunos primeros productos de mediano impacto, ideó la aplicación que ahora es la principal fuente de negocios, llamado DropControl, que es usado por más de 2.000 granjas productivas en el mundo. Se trata de un sistema compuesto por dispositivos electrónicos inalámbricos llamados nodos que monitorean sensores y controlan el sistema de riego y fertiriego de un campo.

Cristóbal desarrolló la empresa desde sus inicios y ha participado en todas las áreas, pero especialmente en la ideación y el desarrollo de DropControl, como principal autor de la Patente asociada, registrada en EEUU, Europa y Australia. Se desempeña como Gerente General de la compañía, velando por el curso estratégico, la coordinación de las áreas y las finanzas. Es el líder del equipo de Gerentes de área y, a través de ellos, del equipo de 54 personas en Chile y 23 en EEUU que actualmente trabajan en WiseConn.

Su pasión por encontrar soluciones tecnológicas a los problemas más relevantes de la sociedad lo llevaron a estudiar Electrónica, disciplina que siempre vio como un medio para poder desarrollar técnicamente estas soluciones. Pero siempre supo que la mera técnica no iba a poder crear soluciones que fueran de alto impacto mundial; se necesitaba también conocimiento de negocios y habilidades blandas. En los últimos años de la Universidad cursó ramos de marketing, economía, finanzas y evaluación de proyectos que le entregaron ese lado comercial.